Edad Media y literatura: Contexto histórico

Puntos clave

Se conoce como Edad Media al periodo histórico comprendido entre los siglos V y XV. El clero tuvo el control de la cultura en esta época, y gran parte de la producción literaria que se conserva es de temática religiosa.

Info 1: Contexto histórico

Con la caída del Imperio Romano de Occidente en el año 476, comienza la época que conocemos como Edad Media. El fin de este período variará según el contexto cultural de cada territorio: en España, se considera que la Edad Media termina en 1492, año de la caída del Reino Nazarí de Granada y de la Conquista de América.

Otros sucesos históricos que marcan el fin de la Edad Media y el paso al Renacimiento fueron la caída de Constantinopla en 1453 y la invención de la imprenta alemana a mitad del siglo XV. Algunas de las características sociales de la Edad Media en la Península Ibérica fueron:

La sociedad se dividía en tres estamentos: oratores (el clero, en control de la cultura), bellatores (la nobleza, quien hace la guerra) y laboratores (el pueblo llano, dedicados al trabajo). Los dos primeros formaban una élite privilegiada, mientras que la mayor parte de la población pertenecía al tercer estamento.

Había tres minorías étnicas: judíos y mozárabes, que vivían principalmente en Al-Ándalus, y francos (nombre que recibía la población extranjera, que era mayoritariamente francesa).

Una situación multicultural: convivieron cristianos, judíos y musulmanes, dando lugar a un gran intercambio cultural y una variada producción literaria.

La pluralidad lingüística: el latín fue dando lugar a las primeras lenguas romances: el gallego-portugués, el asturleonés, el castellano, el navarro-aragonés y el catalán; además de la presencia peninsular del árabe y el euskera.

Info 2: Literatura medieval

La cultura (su creación y, principalmente, su conservación) estaba en manos del clero: era en los monasterios donde se realizaban las copias de los manuscritos.

En el siglo XIII surgirá el mester de clerecía, la escuela poética formada por religiosos y otros autores cultos que componían sus poemas utilizando la cuaderna vía (un tipo de estrofa compuesta por cuatro versos alejandrinos). La producción poética del máster de clerecía se centraba principalmente en difundir los valores cristianos. Además, en la literatura medieval son fundamentales los siguientes rasgos:

El teocentrismo: se tenía la convicción de que Dios ocupaba un lugar privilegiado en el universo, por encima de todo lo demás. Haciendo un paralelismo con su propia vida, el hombre medieval asumía la injusta división estamental en la Tierra caracterizada por el inmovilismo social.

La mayoría de las manifestaciones literarias de esta época, influenciadas por la religión, tendrán un fin didáctico y moralizante (sus personajes se presentan como un ejemplo de buena conducta).

Gran parte de la literatura se transmitió de forma oral, como la poesía épica, los romances, o la lírica popular. La literatura no se concebía para ser leída individualmente, sino para ser compartida en grupo: recitada, cantada, etc.

Para facilitar su memorización, estas obras se escribían mayoritariamente en verso.

El papel del autor aún no había adquirido importancia: la mayoría de las obras que se conservan son anónimas.

En la lírica popular, es común que el yo poético sea femenino.