¿Cómo ha cambiado el sistema educativo español?

Es difícil llegar a imaginar lo muchísimo que ha cambiado el sistema escolar español en los últimos cien años. La educación española en las primeras décadas del siglo pasado dista mucho de lo que es la escuela hoy en día. Esto se aplica a todos los niveles: desde los métodos de enseñanza, a las asignaturas e incluso a la división de cursos que tenemos hoy establecida. En este artículo repasamos algunos de estos elementos para destacar los avances realizados.

Métodos de enseñanza

Una pizarra, algunas tizas, unos cuantos pupitres y sillas. Eso era todo. El profesor (normalmente, hombres) se colocaba frente a la pizarra y los estudiantes (en su mayoría, chicos) se sentaban callados frente a sus pupitres. El profesor ponía las normas y presentaba la información a estudiar, los alumnos memorizaban. “¿Cuál es el teorema de Pitágoras?” “¿Qué es el ablativo absoluto en latín?” “¿Quién puede decirme cuál es la obra principal de Calderón de la Barca?”. Aquellos incapaces de responder a estas preguntas, a menudo recibían un tortazo en la coronilla.

Hoy en día, hay un proyector junto a la pizarra. Los estudiantes tienen portátiles, tablets y smartphones encima de los pupitres. El teorema de Pitágoras, el ablativo absoluto en latín y el teatro de Calderón de la Barca siguen enseñándose en clase, pero ya no solo se cuenta con la ayuda de una pizarra, sino que se utilizan todos los recursos multimedia a nuestro alcance. Y si, a pesar de ello, los alumnos siguen sin saberse la lección, los golpes o el contacto físico a modo de castigo están totalmente prohibidos.

Asignaturas

Los métodos de enseñanza no son lo único que ha cambiado en los colegios españoles en las últimas décadas. El currículo nacional también ha experimentado amplias modificaciones. Los cambios en el currículo nacional incluyen, por un lado, el número de asignaturas, y por otro, el tipo de asignaturas. Previamente, se estudiaban menos asignaturas de las que se dan ahora, y el énfasis estaba en las asignaturas “clásicas” como matemáticas, lengua, latín, griego, filosofía e historia.

Hoy en día, la variedad de asignaturas es mucho mayor. Hace cien años, habría sido imposible imaginar que en las clases (por supuesto, ahora con una ratio equilibrada entre chicos y chicas) los estudiantes aprenderían asignaturas como “información y nuevas tecnologías”, “valores éticos” o “economía”, que se salen del currículo tradicional.

Estructura del sistema educativo español

Además de los cambios en los métodos de enseñanza y en las asignaturas impartidas, ha habido un tercer cambio que ha alterado de manera significativa el sistema educativo español con respecto a como solía ser tiempo atrás. Este cambio tiene que ver con la estructura propia del sistema educativo. Durante la dictadura franquista, la educación volvió a estar en manos de la iglesia y se estableció una educación primaria y secundaria básica desde un punto de vista políticamente sesgado.

Con la llegada de la LOGSE en los años 90, la edad obligatoria de escolarización se amplió hasta los 16 años y se buscó desarrollar el potencial de los alumnos desde una perspectiva humanista. Es en esta época que la educación pasa a dividirse en varios ciclos: Educación Infantil (opcional), Educación Primaria (con seis cursos obligatorios), Educación Secundaria Obligatoria (ESO) que consta de cuatro cursos, Bachillerato (comprendido por dos cursos opcionales pero necesarios para entrar en la universidad) y Grado Medio (como alternativa a Bachillerato y como forma de acceder a la formación profesional o FP).

Aunque la ley educativa ha sufrido modificaciones y cambios dependiendo del gobierno, esta división por ciclos y cursos se ha mantenido relativamente estable, ofreciendo nuevas opciones a los alumnos dependiendo de si quieres seguir estudiando o prefieren acceder al mundo laboral. También se diferencia entre educación privada, concertada y pública; pero los contenidos exigidos a aprender son esencialmente los mismos, de manera que se garantice igualdad de oportunidades y acceso a la educación.

evulpo: una ayuda para los estudiantes

El sistema educativo español actual puede plantear desafíos a los estudiantes contemporáneos: por un lado, hay muchas más asignaturas que atender y por otro, muchos más exámenes que antaño. Por fortuna, gracias a la tecnología, los estudiantes de hoy en día pueden contar con herramientas de apoyo y refuerzo que les faciliten y guíen en su periplo escolar para sacarle el máximo rendimiento posible.

Por ello, es importante abordar los retos actuales con la motivación y la ayuda que tenemos a nuestro alcance. Estas ayudas extra pueden asistirnos en momentos de flaqueza y darnos el empujón que necesitamos para superar todo lo que se nos ponga por delante. El equipo de evulpo tiene un reto personal: ayudar a los alumnos de todo el mundo a rendir al máximo en el colegio y sacar todo el provecho posible al aprendizaje. Gracias a plataformas digitales como evulpo, los alumnos tienen acceso a videos explicativos, resúmenes por temas y series de ejercicios adaptados con los que practicar el conocimiento adquirido. De esta forma, la escuela no se les hará cuesta arriba y conseguirán todo lo que se propongan.

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